LA LEYENDA DE LAS GATAS CAREY

Las gatas carey son de esas gatas de extremos. O te gustan o no. Una de las peculiaridades del pelaje color carey es que el diseño de las manchas es único e irrepetible. De hecho, si se clona una de estas gatas, saldrá una gata carey, pero con las manchas distribuidas en forma distinta.

Se dice que los gatos carey, de la raza que sean, son muy difíciles de reproducir, porque la genética del cruce siempre da como resultado una hembra. Ello es debido a que el color crema rojizo, que es la base, está ligado al cromosoma X. Y en los casos en que salen machos, suelen ser estériles.

Con respecto al origen, en lugar de las discutidas pretensiones genéticas y geográficas habituales me gusta y prefiero contarles la leyenda de las Gatas Carey:

Cuenta la leyenda que, hace varios siglos, el Sol le suplicó a la Luna que le tapara un rato, que le diera una coartada para ausentarse del cielo, para bajar a la Tierra y ser libre, aunque sólo fuera un momento. El Sol quería dejar de ser el centro del Universo, quería que nadie se diera cuenta de su presencia, pasar inadvertido para sentirse liberado de tanta presión. La Luna, ante tanta súplica, accedió, y un día de junio cuando el sól más brillaba, la Luna se acercó al Sol, y le fue cubriendo, poco a poco, para que a los mortales de la época no les sorprendiera de golpe la oscuridad.

El Sol, que desde lo alto hacía millones de años que observaba la faz de la Tierra, no lo dudó, para sentirse libre y pasar desapercibido se hizo corpóreo en el ser más perfecto, rápido y discreto que había; UNA GATA NEGRA. La Luna, perezosa, en seguida se sintió cansada, y sin avisar a su amigo Sol, se fué apartando. Cuando Sol se dió cuenta ya era demasiado tarde, salió corriendo hacia el Cielo, y tan rápido huyó, que se dejó en su morada momentánea parte de él; cientos de rayos de Sol se quedaron dentro de la Gata Negra.
Desde entonces, todos los gatos que nacieron de la Gata Negra eran lo que nosotros, por desconocimiento, llamamos GATOS CAREY. Su manto oscuro se ve roto por cientos de rayos rojos, amarillos y naranjas. Y lo que la gente tampoco sabe es que su origen solar les atribuye propiedades mágicas, ya que atraen la buena suerte y las energías positivas.

Así que, si tienes una gata carey, tienes una gata solar, miles de rayos se distinguen en su manto, y si su cara se divide en dos (como suele suceder en las gatas carey) es para evidenciar su doble naturaleza; gatuna y divina.

--- Artículo dedicado a nuestra amiga CELESTE, 
una preciosa gatita carey semi-salvaje rescatada de un parque, 
ahora convertida en una muy mimosa señorita de casa --- 

---- Otros gatitos carey que actualmente están buscando un hogar
en la Isla Gran Canaria ----








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